
Bonsái arce negundo: cuidados, ventajas y limitaciones

El acer negundo, conocido como arce negundo, arce americano o boxelder, es una especie originaria de Norteamérica que, aunque no es de los arces más cultivados en bonsái, tiene características interesantes que lo convierten en una opción a considerar.
Su crecimiento rápido, su resistencia y la posibilidad de trabajar con ejemplares de buen tamaño lo hacen atractivo para algunos aficionados. Sin embargo, no está exento de retos, especialmente por el tamaño de sus hojas.
- ¿Por qué elegir un arce negundo como bonsái?
- Características del arce negundo en bonsái
- Cuidados básicos del bonsái arce negundo
- Problemas comunes en el arce negundo bonsái
- Consejos prácticos y experiencia personal
- Preguntas frecuentes sobre el bonsái arce negundo
- Un bonsái apto quienes les gustan los retos
¿Por qué elegir un arce negundo como bonsái?
El arce negundo destaca por su vigor y adaptabilidad. Puede crecer en diferentes tipos de suelo y soporta climas variados, lo que lo hace accesible para muchos cultivadores. Además, sus troncos desarrollan pronto un aspecto maduro y, en ejemplares trabajados con paciencia, se pueden conseguir bonsáis muy expresivos.
En comparación con otros arces más usados en bonsái, como el Acer palmatum o el Acer buergerianum, el negundo presenta ventajas (resistencia y rapidez de crecimiento) pero también desventajas: sus hojas son compuestas y bastante más grandes, lo que dificulta mantener proporciones armoniosas en bonsáis pequeños. Por eso, suele cultivarse mejor en tamaños medianos o grandes.
Características del arce negundo en bonsái
Hojas compuestas y tamaño
Las hojas del acer negundo son compuestas, con entre 3 y 7 folíolos, y alcanzan un tamaño considerable. Esto lo convierte en un reto a la hora de buscar refinamiento en el bonsái, aunque con técnicas de poda se puede conseguir cierta reducción.
Tronco y corteza
El tronco engrosa con rapidez y desarrolla una corteza atractiva con los años, lo que es un punto a favor para obtener ejemplares con aspecto maduro en relativamente poco tiempo.
Crecimiento y vigor
Es un árbol de rápido crecimiento, lo cual facilita la formación de troncos gruesos y ramas principales, aunque exige podas frecuentes para mantener la estructura.
Cuidados básicos del bonsái arce negundo
Ubicación y luz
Necesita mucha luz, preferiblemente pleno sol, aunque en veranos muy cálidos conviene protegerlo en las horas centrales para evitar estrés hídrico.
Riego y humedad
Requiere riegos regulares, manteniendo el sustrato húmedo pero no encharcado. Su vigor lo hace bastante tolerante, pero en maceta el descuido en riego puede ser fatal.
Abonado y sustrato
Agradece un abonado abundante durante primavera y verano, lo que favorece su crecimiento. Prefiere sustratos drenantes, como akadama mezclada con grava volcánica o pomice.
Poda y reducción de hoja
La poda debe ser constante para controlar su vigor. Con defoliados parciales y podas selectivas se puede reducir el tamaño de las hojas, aunque nunca serán tan pequeñas como las de un palmatum.
Alambrado y modelado
El alambrado se realiza mejor en ramas jóvenes, ya que las viejas se vuelven rígidas y quebradizas. Se recomienda trabajar con tensores en ejemplares más desarrollados.
Trasplante y raíces
Debe trasplantarse cada 2 o 3 años, en primavera, reduciendo raíces poco a poco. Es una especie que responde bien a trasplantes si se hacen con cuidado.
Problemas comunes en el arce negundo bonsái
- Hojas demasiado grandes: la principal limitación estética para bonsái en tamaños pequeños.
- Plagas: puede verse afectado por pulgones y oídio en ambientes húmedos.
- Errores frecuentes: descuidar la poda y permitir que el árbol pierda la estructura, o ubicarlo en zonas de sombra que reducen su vigor.
Consejos prácticos y experiencia personal
En mi caso, no he cultivado un acer negundo porque prefiero especies como el acer buergerianum, que me resultan más adecuadas para bonsáis pequeños gracias a su hoja más reducida. Además, no dispongo de espacio suficiente para un bonsái mediano o grande, que es donde el negundo puede lucirse mejor.
Dicho esto, he tenido la oportunidad de ver en persona un bonsái de arce negundo ya desarrollado y debo reconocer que era espectacular. Su tronco imponente y la fuerza de su ramificación transmitían mucha presencia, algo que lo hace ideal para quienes buscan ejemplares grandes y con carácter.
Preguntas frecuentes sobre el bonsái arce negundo
¿Es recomendable el arce negundo como bonsái?
Sí, aunque no es de los más usados. Se recomienda para bonsáis medianos o grandes debido al tamaño de sus hojas.
¿Qué cuidados básicos necesita?
Mucho sol, riego regular y podas constantes para controlar su vigor.
¿Por qué no es muy común en bonsái?
Porque sus hojas grandes lo hacen poco apto para bonsáis pequeños y refinados.
¿Cómo reducir el tamaño de sus hojas?
Con defoliados parciales y podas selectivas, aunque nunca serán tan pequeñas como en otros arces.
¿Qué estilos funcionan mejor con él?
Vertical informal y estilos libres, que aprovechen su vigor y su porte.
Un bonsái apto quienes les gustan los retos
El bonsái de arce negundo no es la primera opción de muchos aficionados, pero puede ofrecer resultados sorprendentes en manos de quien sepa trabajarlo. Sus hojas grandes lo limitan en ciertos tamaños, pero su tronco vigoroso y su rápido crecimiento permiten crear ejemplares con gran presencia. Si buscas un bonsái poco común, de porte fuerte y con potencial para lucir en tamaño medio o grande, el acer negundo puede ser una elección interesante.
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